El 4 de julio de 2024, se registró un lamentable suceso en la zona rural de Valdivia, Antioquia, donde 6 militares perdieron la vida y varios resultaron heridos. Este incidente tuvo lugar en la vereda La Llana, en el corregimiento de Radual Viejo, municipio de Valdivia, Antioquia.
El Frente 18 y 36 de las FARC-EP ha proporcionado detalles sobre los eventos que precedieron a esta trágica pérdida. Informaron que días antes del incidente, se detectó la presencia de grupos paramilitares infiltrándose en la región, en áreas como Cuatro Cajas, El Salivón, La Clara, Lejanías, La Coposa y La Llana. Se identificaron campos minados como medida defensiva ante la creciente amenaza paramilitar en El Piñal, El Tesorito y El 15.
El ejército fue avistado inicialmente en la vereda Fonda el 28 de junio de 2024, generando preocupación entre las FARC-EP. Luego, se observó su presencia en Salivón el 3 de julio de 2024, mientras las FARC-EP se retiraban por precaución. El 4 de julio de 2024, las fuerzas militares llegaron a La Clara a las 07:00 AM y posteriormente se dirigieron a La Llana.
En la tarde de ese mismo día, a las 16:00 PM, las tropas militares ingresaron a los campos minados preparados por las FARC-EP como medida defensiva. Aunque el ejército afirmó haber tenido enfrentamientos con grupos paramilitares, las FARC-EP contradicen esta versión, alegando que fueron específicamente buscados por las fuerzas militares, desencadenando el trágico incidente.
Las FARC-EP reafirman su compromiso con el proceso de paz en Colombia, pero instan al gobierno a cumplir sus obligaciones para garantizar seguridad y estabilidad en las comunidades afectadas. Hacen un llamado para que el ejército opere en áreas con presencia paramilitar evidente, en vez de desplegarse en zonas donde las FARC-EP están presentes, evitando conflictos y violencia.
Los frentes 36 y 18 de las FARC-EP reiteran su disposición al diálogo y la paz, pero hacen un llamado al gobierno para que demuestre compromiso no solo en la mesa de negociaciones con las FARC-EP, sino también con las comunidades locales afectadas y en la lucha contra el paramilitarismo, una grave amenaza para la estabilidad y la paz en la región.